Con el objetivo de formar capital humano avanzado en tecnologías digitales y en el esfuerzo por articular al mundo científico, Inria Chile ha enviado más de 50 estudiantes universitarios chilenos a hacer pasantías, perfeccionarse y desarrollar su investigación aplicada con los científicos y técnicos de Inria en Francia.
Inria es el Instituto nacional de investigación en ciencias digitales de Francia y reconocido a nivel mundial por sus aportes en I+D, ciencias de la computación y matemáticas aplicadas. Como parte de su trayectoria de colaboraciones científicas con universidades chilenas, acoge a estudiantes de ingeniería para realizar prácticas en uno de sus ochos centros de investigación en ese país europeo.
Junto con la llegada de Inria a Chile en 2012, las primeras pasantías se efectuaron gracias al programa de Conicyt “Ciencia y Tecnología, Estadías Cortas en el Extranjero para Estudiantes de Ingeniería” y, tras su fin en 2016, a través de acuerdos con la Universidad de Chile, la Pontificia Universidad Católica y la Universidad Técnica Federico Santa María. Cinco estudiantes de cada casa de estudios están durante tres meses en Francia, entre enero y marzo, trabajando con equipos de investigación de Inria. Cada uno recibe ayuda para su viaje y estadía, cofinanciada entre Inria y la universidad.
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Postulé a esta pasantía sin saber en qué equipo de Inria iba a trabajar. Luego, escogí el tema por la relación con mi carrera. Una vez en Francia me ayudaron mucho, me mandaron a un curso matemático de ecuaciones diferenciales; trabajé con dos equipos, el de Inria y el de Gipsa lab. Eso fue muy interesante, porque pude ver dos visiones, una del modelamiento y otra de la automatización.
Estudiante de ingeniería civil de la Universidad Técnica Federico Santa María
Explica Dhannai Sepúlveda, estudiante de ingeniería civil de la Universidad Técnica Federico Santa María, quien fue parte del equipo NECS, con el cual trabajó con ecuaciones diferenciales para el control de tráfico de vehículos autónomos.
Ella cuenta que sus supervisores eran muy cercanos, se explicaban bien, conoció a un buen grupo de trabajo que la ayudó y con el que se sintió cómoda. Señala que hoy está comenzando el magíster en Chile y viendo si puede aplicar lo aprendido en su tema, que es fluidos. También, destaca el aprendizaje de inglés que logró en esta pasantía, que le permite ahora leer papers y avanzar mucho más rápido en su investigación.
Sebastián Gallardo, estudiante de ingeniería civil informática de la Universidad Técnica Federico Santa María, fue al centro Inria Sophia para trabajar en el equipo Biovisión, que estudia la retina y la corteza visual. Ahí apoyó una tesis doctoral sobre el movimiento que hacen la retina y la corteza visual al predecir el desplazamiento de los objetos, adaptando un modelo matemático para hacer simulaciones al software Mácula, de Inria.
Afirma que se sintió integrado con el equipo, que era intercultural, con un francés y gente de Grecia, Taiwán, Alemania y otros países; entre ellos había estudiantes de máster, doctorado y postdoctorados. Sentí que fui un aporte, porque el equipo estaba más enfocado en la neurociencia y no tan cercano a la parte de softwares y algoritmos, que yo aporté.
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Me sirvió en lo profesional, aprendí mucho, hice vínculos y hasta el día de hoy sigo en contacto y estoy haciendo mi trabajo de título en un proyecto paralelo al que hice, que surgió allá.
Estudiante de ingeniería civil informática de la Universidad Técnica Federico Santa María,
En Inria en Chile, consideran un éxito estos programas, los cuales han tenido una evaluación muy positiva tanto de los estudiantes como de los equipos de investigación de Inria que los acogieron.
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Todos estos estudiantes participaron en proyectos de investigación; varios contribuyeron a publicaciones científicas durante su pasantía y siguieron en contacto con los equipos después de su vuelta a Chile. Algunos, incluso, integraron programas de doctorado en Francia a raíz de esta experiencia.
Directora Ejecutiva Inria en Chile
Nayat Sánchez-Pi explica que seguirán fomentando este programa de movilidad de estudiantes chilenos hacia Inria en Francia, porque con esto proporcionan a los estudiantes “la oportunidad de adquirir, desde el inicio de sus estudios, una experiencia en un centro de investigación internacional y, quizás, incentivar a que más de ellos decidan investigar a futuro”, asegura.